“¿Cómo sacar partido a LinkedIn? LinkedIn no sirve para nada, yo no conozco a nadie que haya encontrado trabajo gracias a LinkedIn”. ¿Te suena? Siempre está el típico cenizo que se atreve a generalizar tras sufrir una mala experiencia con algo o con alguien. Lo cierto es que LinkedIn es, a día de hoy, la red profesional por excelencia. Con más de 610 millones de usuarios, LinkedIn se sitúa muy en la delantera en cuanto a redes sociales enmarcadas dentro del ámbito laboral. Muy por detrás, está Viadeo, con 50 millones de usuarios; Xing, con 12 millones de usuarios (muy popular en países como Alemania, Austria y Suiza); y BeBee con 11 millones de usuarios.
El amplio volumen de usuarios de LinkedIn permite que sea más fácil encontrar a los perfiles de tu sector que estás buscando y establecer así conexiones entre los diferentes profesionales. En otras palabras, sacar partido profesional a LinkedIn resulta más fácil que cualquier otra plataforma. De hecho, para los profesionales de Recruitment, LinkedIn se convierte en una plataforma prioritaria para encontrar talento. Según apuntan desde El Economista, el 87% de las empresas utiliza esta red social para buscar a nuevos candidatos y el 88% de los reclutadores consulta la actividad de los candidatos antes de programar una entrevista.
5+1 consejos para sacarle todo el partido a LinkedIn
Si estás buscando trabajo o, simplemente, quieres reforzar tu marca personal, LinkedIn puede convertirse en tu más fiel aliado. Aunque, eso sí, deberás andar con cuidado y ser muy metódico. Descubre cómo puedes llevar tu perfil de LinkedIn al siguiente nivel con estos 5+1 super consejos.
1. Especialízate
- Optimiza tu perfil con una keyword
- Publica contenido pertinente
- Publica con regularidad
¿Cuál es tu rol profesional o en qué te gustaría enfocarte?¿Qué te apasiona?¿Me lo podrías explicar con una palabra? No vale contestar con una vaguedad. Marketing, Finanzas o Derecho, son términos muy amplios. Lo que te pido, en este ejercicio es que seas capaz de determinar un área en concreto en la que seas especialmente bueno y en la que, por tu experiencia o habilidades, destacas por encima del resto. Algo más preciso sería decir: Estrategia Digital, Asesor Fiscal o Derecho Penal. A la hora de optimizar tu perfil de LinkedIn, lo más recomendable es escoger esa Keyword específica que defina tu rol profesional y utilizarla el máximo número de veces. Desde tu URL hasta tus experiencias profesionales.
Cuando empieces a publicar contenido en LinkedIn también deberías tener muy en cuenta tu foco de especialización. Asegúrate de aportar valor a tu red de contactos sobre ese tema en concreto. Antes de compartir un artículo pregúntate si eso te va a ayudar a posicionarte como un referente en esa área en concreto o, simplemente, te convertirá en un profesional más del sector. Otro punto de lucha es la regularidad de publicación. Deberías ser capaz de aparecer con cierta frecuencia en el timeline. Por lo menos, deberías publicar entre 1 y 3 veces por semana. Según apunta LinkedIn, las franjas horarias en las que se registra más actividad en esta red social son los martes, miércoles y jueves de 7:30 a 8:30.
2. Sácale partido a tu perfil de LinkedIn
- Cuida tu primera impresión
Según Judi James, experta en lenguaje corporal, nos formamos una primera impresión en los 7 primeros segundos. ¿Qué conclusión crees que sacará un usuario después de pasar 7 segundos viendo tu perfil de LinkedIn? Te animo a que, ahora mismo, vayas a tu perfil de LinkedIn y saques tú mismo tus propias conclusiones. Si crees que esa primera impresión no es lo suficientemente buena, optimiza tu perfil de LinkedIn para conseguir que los usuarios que aterricen en tu página te tengan en buena consideración. Ten en cuenta que sólo un 51% de los usuarios tiene su perfil 100% completo. Esto puede servirte como un tremendo aliciente para ganar cierta distancia preferente con respecto al resto de perfiles de tu sector.
3. Se exigente con tus conexiones
- Se selectivo con tus conexiones
- Envía un mensaje de conexión
Del mismo modo que a tu fiesta de cumpleaños no invitas a todo el mundo, en tu perfil de LinkedIn tampoco vas a poder conectar con todos los perfiles que pasen por delante tuyo. ¿Por qué? Principalmente, por dos motivos:
- Si permites que todo el mundo entre en tu red de contactos, tu timeline será un cajón desastre con información dispar y desordenada. Además, te costará muchísimo conseguir engagement con los contenidos que tú publiques.
- Si permites que todo el mundo entre en tu red de contactos, resultará muy complicado establecer conexiones profesionales. ¿Qué sentido tiene que un ingeniero de caminos quiera contactar con un profesor de secundaria? Así, a bote pronto, ninguno.
Además, agregar a contactos sin ton ni son no está bien visto. Hay que tratar de tener muy presente cuál es tu objetivo con LinkedIn. Convertirte en una marca reputada. Existen otras redes sociales que te ayudarán a hacer amigos. Aquí, venimos a hacer personal branding y a establecer conexiones profesionales.
Entonces, ¿a quién debo agregar? Lo ideal es conectar con todos aquellos profesionales que puedan aportarte valor y a los que tú puedas aportar valor. A la hora de buscar a nuevas conexiones, sé muy selectivo. Busca a aquellos contactos que –ya sea por el sector profesional, la experiencia o la posición- puedan resultarte interesantes. Cuando les envíes una solicitud de conexión, no olvides editar tu mensaje con una nota personalizada.
Si quieres ampliar tu red de contactos de manera rápida y efectiva, puedes utilizar la aplicación LeadKedin. Esta plataforma te permite agregar masivamente a aquellos contactos que cumplen determinadas características. En su versión gratuita, no puedes personalizar el mensaje de conexión y, además, el número de mensajes diarios está limitado.
4. Crea tu sello personal
Vamos a hacer una prueba de agudeza visual. ¿De qué marca es el anuncio que aparece encima?¿Lo tienes?¿Sí? Efectivamente, el anuncio corresponde a la empresa de telefonía Vodafone. Si te pregunto cómo lo has averiguado, posiblemente me hablarás de la estética y encuadre de la imagen, del color corporativo o del claim utilizado. Son mensajes no textuales que consiguen calar hondo en el receptor y asociar una marca a una serie de intangibles.
Con tu perfil de LinkedIn tienes que conseguir algo similar. Apodérate de un hashtag, utiliza un estilo de escritura muy definido, publica imágenes con un patrón determinado… Al final, lo que tienes que conseguir es que, cuando alguien vea un post tuyo en su timeline identifique rápidamente al autor sin necesidad de consultar antes el nombre.
5. Cuida las relaciones personales
Validar aptitudes, escribir recomendaciones, pedir consejo profesional por mensaje privado… Aprovecha todos los pretextos que brinda LinkedIn para establecer conexiones personales con perfiles profesionales que puedan resultarte interesantes. Cuando establezcas contacto con otros perfiles asegúrate de adecuar el tono y el mensaje a tu interlocutor. Aunque parezca una obviedad, no es lo mismo hablar al Director General de una gran corporación que enviar una solicitud de conexión a un antiguo compañero del colegio.
Algo que también es imprescindible y que, a menudo, la gente olvida es dar las gracias. Siempre que recibas interacción por parte de alguien agradéceselo. No importa si es él o ella el que te está pidiendo algo. Dar las gracias es algo que poca gente hace y que puede ayudarte a marcar la diferencia.
5+1. Mide, mide mide
Jamás podrás sacarle todo el partido a LinkedIn si llevas buen rumbo si no calibras tu dirección cada cierto tiempo. Existe un portal oficial de LinkedIn que te indica cuan influyente eres en esta red social. Además, te proporciona consejos para ir mejorando determinadas áreas. Es lo que se conoce como Social Selling Index de LinkedIn y deberías echarle un vistazo por lo menos una vez al mes.
Ahora que ya tienes una idea clara de la potencialidad de LinekdIn puedes empezar a sacarle el máximo partido a esta herramienta. La próxima vez que alguien te diga aquello de que LinkedIn no sirve para nada sabrás a ciencia cierta que estás frente a un ignorante.